Hoy, Avilés y el colegio de las Doroteas lloran la pérdida de una figura muy querida, Josefina Castro, conocida cariñosamente como “la madre Castro”. Aunque había pasado más de una década desde que se trasladó a su Galicia natal en 2007, su influencia y legado perduran en la comunidad educativa.
Josefina Castro será recordada por su destacado papel en la promoción y desarrollo del baloncesto en el colegio Paula Frassinetti. Su dedicación y pasión por este deporte se convirtieron en un verdadero referente, especialmente para las niñas, que encontraron en ella una guía y una inspiración en las canchas de baloncesto.
El deporte no fue la única pasión de la madre Castro; su vida estuvo también marcada por la religión. Desde su infancia en Minas de San Finx, La Coruña, donde jugaba al tenis con otros niños y montaba a caballo, hasta su labor en el colegio de las Doroteas en Avilés, la madre Castro siempre fue una figura comprometida con sus creencias y valores.
Hoy, Avilés y la comunidad educativa del colegio de las Doroteas rinden homenaje a Josefina Castro, una mujer cuyo legado perdurará en la memoria de todos aquellos a quienes tocó con su dedicación, pasión y amor por el baloncesto y la religión. Su vida es un testimonio de inspiración y compromiso que perdurará en el tiempo. Descanse en paz.
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