OVIEDO, 16 (EUROPA PRESS)

La consejera de Educación del Principado de Asturias, Lydia Espina, ha defendido este jueves el proyecto de Real Decreto de Ordenación del Sistema de Formación Profesional, que desarrolla la nueva ley en vigor, y lo considera “un salto de gigante”.

“Va a suponer un antes y un después”, ha dicho la consejera con motivo de su asistencia en Madrid a la Conferencia Sectorial de Educación.

Espina ha defendido el procedimiento de elaboración y el resultado final, reconociendo al Ministerio de Educación y FP “el esfuerzo tan grande que ha hecho por desarrollarlo, sin duda un gesto valiente, porque había un enorme trabajo por delante y se ha hecho con muchísimo rigor”.

La consejera ha destacado que se va a reforzar la necesaria colaboración entre centros de enseñanza, empresas y administración “en el impulso de la FP, desde la propia definición de la FP dual -probablemente, el núcleo del sistema- hasta la flexibilidad que permite para adaptarse a las peculiaridades del territorio y de los centros en múltiples formas”, como pueden ser los módulos optativos, el incremento de la duración de los ciclos formativos o las dobles titulaciones.

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También se ha referido al impulso de metodologías activas y organizaciones curriculares “distintas de las habituales, en las que los centros pasan a ser protagonistas potenciando la autonomía pedagógica y organizativa”, o a que la empresa “pase a ser corresponsable en la formación del alumnado armonizando los procesos entre el centro y la propia empresa”.

Igualmente, la consejera valora “la alternancia entre los periodos de formación en la empresa y en el centro, que es una de las claves de la mejora de la FP”.

Espina ha elogiado que se integren los dos sistemas de FP hasta ahora, “que es una demanda que todas y todos compartimos, más allá de algunas resistencias que pudieran aparecer y de las lógicas dificultades que supondrá”. Y augura que va a conminar a las comunidades autónomas a “a bajar la ratio”, además de proponer que en los módulos más manipulativos o impartidos en espacios específicos existan dos docentes a partir de doce matrículas.

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La consejera destaca también la aparición de nuevas figuras para la gestión y coordinación de los centros de FP (innovación, internacionalización, orientación, etcétera); que se organicen los grados de forma progresiva y coherente “facilitando el aprendizaje a lo largo de la vida”; la aparición de la figura de los expertos, “como otra forma más de colaboración entre el sector productivo y el sector educativo”, o que se incorporen nuevos módulos en los ciclos formativos, en especial, Inglés Técnico y Digitalización.

Espina ha afirmado, por último, que la tarea de desarrollar el real decreto “será ardua y exigirá mentalidad abierta por parte de centros, empresas y la propia administración con competencia para desarrollar las normas que se deriven del RD”, pero ha añadido que “se trata de un reto apasionante, un reto de país, al que nos debemos entregar todos los agentes implicados en la FP. Tenemos una oportunidad largamente demandada y, probablemente, única”.

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