El pasado día, Carmen Hidalgo Álvarez, una mujer que desempeñó un papel destacado como esposa y madre de alcaldes en Oviedo, falleció en su hogar de la ciudad a la edad de 102 años. Su vida estuvo marcada por una dedicación inquebrantable a su familia y una participación activa en la vida social y cultural de la comunidad.
Nacida en Sama de Langreo en 1921, Carmen Hidalgo Álvarez era hija de Antonio Pérez Hidalgo, quien ocupó importantes cargos en el Banco Herrero, incluyendo el de director y consejero. En 1945, contrajo matrimonio con Valentín Masip, alcalde de Oviedo en su momento, y juntos criaron a cuatro hijos: Jaime, Mari Carmen, Emma y Antonio. Tras enviudar en 1963, Carmen se dedicó por completo al cuidado de sus hijos, demostrando su amor y compromiso como madre.
A pesar de sus responsabilidades familiares, Carmen no dejó de participar activamente en la vida social y cultural de la ciudad de Oviedo. Su vida es un testimonio de una época y un estilo de vida que marcaron la historia de la burguesía asturiana en el siglo XX. Con su partida, se apaga una parte importante de la memoria de esa época y de la sociedad ovetense. Su legado y contribuciones a la comunidad serán recordados y apreciados por aquellos que la conocieron y apreciaron a lo largo de su vida.
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