La Unión de Jubilados y Pensionistas de UGT Asturias defiende esta reforma “progresista” para “actualizar el Estado del Bienestar”
OVIEDO, 19 (EUROPA PRESS)
La diputada por Asturias y presidenta de la Comisión del Pacto de Toledo, Luisa Carcedo, ha defendido este domingo en Oviedo la nueva reforma del sistema público de pensiones y ha lamentado que “cada medida de progreso” para combatir “la desigualdad” y “la pobreza” suponga “un drama de país”.
De este modo, ha asegurado que el nuevo modelo ofrece “tranquilidad” a la ciudadanía, tanto a los pensionistas actuales como a los pensionistas del futuro, y garantiza la sostenibilidad, solidaridad y suficiencia del sistema atendiendo a las recomendaciones del Pacto de Toledo del que, dice, se habían salido los gobiernos del PP de Mariano Rajoy, optando por “esquilmar la Seguridad Social con gastos impropios”.
Asimismo, ha asegurado que tanto los “fantasmas de la derecha” como las críticas de la CEOE se basan en “un mantra que no está en modo alguno justificado”, resaltando que tanto el incremento de las cotizaciones como la subida del salario mínimo son realistas y no van a descomponer ninguna ganancia empresarial ni suponer pérdidas de empleo.
Igualmente, entiende que la reforma “sobrepasa” las demandas y expectativas de los movimientos de pensionistas, destacando que busca perfeccionar el sistema público de pensiones y sus componentes contributivo y redistributivo de la riqueza, al tiempo que asegura la actualización conforme al IPC y amplía el mecanismo de equidad entre mujeres y hombres.
Carcedo participó junto a la vicesecretaria General, Organización y Coordinación de la Federación Socialista Asturiana (FSA-PSOE) y diputada autonómica, Gimena Llamedo, en una reunión con Manuel Francisco Menéndez y Pelayo Suárez, secretario general y secretario de Organización y Administración de la Unión de Jubilados y Pensionistas de UGT Asturias, después de que este viernes, día 17, el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicase el Real Decreto Ley que desarrolla la segunda fase de la reforma de pensiones, centrada en elevar los ingresos del sistema para hacer frente a las tensiones financieras por la jubilación de los ‘baby boomers’ en las décadas de los 30 y los 40.
La reforma, que entrará en vigor el 1 de abril salvo determinados preceptos de la misma, contempla subidas de bases máximas y de cotizaciones, mejoras en las pensiones mínimas y el establecimiento de un modelo dual para calcular la pensión, que dará opción a elegir entre los últimos 25 años cotizados o 29 años, descartando en este caso los dos peores.
Esta norma, fruto del acuerdo entre el Gobierno, CCOO y UGT y negociada con Bruselas, es uno de los hitos vinculados al cuarto desembolso de fondos europeos y con ella se completa el paquete total de cambios en el sistema de la Seguridad Social recogidos en el Plan de Recuperación.
Al respecto, Manuel Francisco Menéndez ha dicho que esta reforma es “completamente diferente” a las anteriores y está tanto “con los pensionistas” como con “los desfavorecidos” y también “con los que más ganan”.
Para el secretario general de la Unión de Jubilados y Pensionistas de UGT Asturias se trata de un modelo que apuesta por “los ingresos” frente a los “recortes”. Así, aseguró que el sindicato está con el Gobierno en el objetivo compartido de incrementar las pensiones mínimas hasta 1.200 euros en cuatro años.
Se trata, asegura, de una reforma “progresista” que permite “actualizar el Estado del Bienestar” y garantizar que responda ante situaciones de crisis como la actual coyuntura. “Marcará un hito histórico no solo en España, sino en Europa”, resalta.
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