En un escalofriante suceso en El Picón, Ribera de Arriba, Pablo Muñiz, de 46 años, perpetró el parricidio de su padre de 73 años, causando conmoción en la comunidad. Desde su ingreso bajo custodia en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) el martes al mediodía, Muñiz ha mostrado un estado psicótico profundo, repitiendo frases como “Viva España” y amenazas hacia el personal, lo que ha imposibilitado a la Guardia Civil realizar una declaración formal sobre el crimen.
La investigación se complica al revelarse que Muñiz podría estar padeciendo una enfermedad mental no tratada adecuadamente. Los esfuerzos se centran en rastrear su historial médico y familiar para esclarecer si estaba bajo tratamiento psiquiátrico privado, ya que no se ha encontrado registro en el sistema público asturiano. Testimonios cercanos sugieren que el asesino llevaba una vida discreta, ocultando sus problemas mentales mientras mantenía la apariencia de normalidad.
Este incidente ha dejado una profunda huella en la comunidad de La Borbolla, en Grado, donde Muñiz pasaba largos periodos. Vecinos expresan su incredulidad y shock ante un hombre que, a pesar de su amabilidad, ocultaba una grave enfermedad mental. Para seguir las actualizaciones de este caso, visita nuestras redes sociales en Twitter y Facebook, o contacta con la Guardia Civil para más información.
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